Las masas de hielo del Polo Norte han ido decreciendo a lo largo de los últimos años, pero sin embargo, en el Polo Sur está ocurriendo justamente lo contrario. La placa de hielo de la Antártida ha alcanzado un récord de 19,45 millones de kilómetros cuadrados, mientras que en la placa del ártico se producía la mayor pérdida de hielo en la historia conocida. Todo apunta a que este fenómeno viene producido por cambios en los patrones de los vientos, el enorme hueco en la capa de ozono sobre la Antártida y, principalmente, por la actividad humana.
Otra diferencia importante entre los dos polos es una cuestión geográfica: mientras el Ártico es un océano abierto rodeado de tierra, la Antártida es una gran masa de tierra rodeada por mar, lo que facilita la expansión del hielo marino.
El viento se combina con el hueco en la capa de ozono, causado por los gases contaminantes cloro y bromo producidos por el hombre. Este hueco hace más fría porque la capa de ozono normalmente mantiene cálido el planeta. Ese efecto enfriador provoca que los vientos cerca de la superficie se vuelvan más fuertes y empujen el hielo hacia fuera.
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Daniel Pérez 1ºF