Un ataque mortal de una araña a una avispa fue inmortalizado por el ámbar hace 100 millones de años.
En la imagen, podemos observar claramente cómo una araña está a punto de devorar a una presa.
Este fósil fue encontrado en un valle en Myanmar, Asia.
Contiene una araña macho en su propia telaraña a punto de comer una pequeña avispa parásita, aunque no lo consiguió.
La araña, que estuvo esperando a que la avispa quedara inmovilizada en su tela de araña varias horas, quedó cubierta de resina nada más y nada menos que unas fracciones de segundo antes del ataque.
Ignacio Martínez 1ºF Nº17
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ResponderEliminarGracias a estos fósiles se pueden saber miles de cosas sobre la naturaleza y lo mejor es poder ver imágenes como ésta. Yo nunca pensaría que una araña quedaría atrapada con la resina de una colmena, pero por suerte, podemos conocer estos fenómenos gracias a la ciencia. Yo creo que la araña nunca se esperaró que cazando una presa fuese ella misma la presa. En definitiva, una noticia muy buena y muy bien argumentada por parte de nuestro compañero.
ResponderEliminarDaniel Fraile 1ºF Nº12
Gracias a estos fósiles, podemos conocer muchas cosas sobre los animales que lo componen,
ResponderEliminarEs algo muy curioso que se halla quedado inmortalizado el momento en el que una araña fuera a comerse a su presa y más si este momento fue hace muchisimo tiempo.
MªPaz Moreno 1ºE