T1.2 Foro de debate: Alfred Wegener, un
hereje de la ciencia
Vida de Alfred
Wegener.
Alfred
Lothar Wegener (Berlín, Alemania,
1880- Groenlandia , 1930).
Graduado en astronomía a los veinticuatro años y en
meteorología poco tiempo después. Realizada viajes en globo junto a su hermano
Kurt para estudiar la atmósfera, llegando a estar cincuenta y dos horas en el
aire, batiendo así un récord del mundo.
En 1906, viajó por primera
vez a Groenlandia para realiza una
expedición a Groenlandia. Durante los dos años de expedición, realizó trabajos
de investigación sobre la meteorología y la cartografía del lugar.
En 1908, inicia su labor como profesor de
Astronomía y de Meteorología en la Universidad de Marburg, y en 1912 vuelve a
una segunda expedición a Groenlandia acompañado del explorador J. P. Koch. Fue
un viaje poco productivo.
Su investigación se detuvo
debido a que fue reclutado para la Primera Guerra Mundial.
En 1924 publica "Die Klimate der Geologischen Vorzeit" ("El clima en el transcurso del tiempo
geológico") junto a Wladimir P.
Köppen. Tras su muerte, ocupa la dirección del Departamento de Investigaciones
Meteorológicas del Observatorio de la Marina en Hamburgo.
En 1926, aceptar una cátedra
de Meteorología y Geofísica de la Universidad de Graz (Austria).
La tercera expedición a
Groenlandia se inició el 1 de noviembre de 1930 acompañado de Villumsen. Ambos
murieron durante la expedición, el cadáver de Wegener fue encontrado 5 meses
después, pero no el de su compañero.
Concepción del
mundo en el siglo XX.
Para lograr entender por qué
fue tan criticada la teoría propuesta por Wegener, es necesario conocer el
paradigma científico de la época. Durante el siglo XX se defendía la teoría de
que la Tierra era sólida y rígida, todo lo contrario de lo que Wegener propone.
Se suponía que la Tierra era en un principio
una masa en fusión que se hallaba en un proceso de enfriamiento y
solidificación y, por lo tanto, de contracción. Los materiales más ligeros
habrían ascendido a la superficie originando las rocas ígneas y metamórficas y
otros sedimentos asociados y en la parte más interna, estarían las rocas más
densas: basalto, al gabro o a la peridotita.
Las montañas se
interpretaban como la causa de la contracción terrestre. Una presión en forma
de arco hacía que ciertos sectores de la superficie terrestre se hundieran
originando océanos, mientras que los continentes permanecerían firmes sobre las
aguas formando bloques no fracturados o "horsts". Con el paso del
tiempo, ciertas zonas continentales se hundieron de modo que fueron cubiertas
por el mar.
Para explicar la conexión
que había entre los fósiles de distintos continentes, plantean la existencia de
puentes intercontinentales que los conectaban en las profundidades
del fondo oceánico.
En 1910, F.B. Taylor elabora
ya la primera hipótesis sobre los "desplazamientos continentales”. Para
defender su idea, en su obra "Bearing of the Tertiary mountain belt on the origin of the Earth's
plan, no se basa en que los
perfiles de los continentes coinciden, sino en la disposición de las
cadenas montañosas del Terciario en Eurasia, su geometría explicaría ese
desplazamiento.
Los descubrimientos de Wegener
Tras sus expediciones a Groenlandia,
Wegener observó el desplazamiento de los bloques de hielo pensando que podría
ocurrir un movimiento análogo de los continentes en los fondos coeánicos. En su
teoría “La deriva continental” expone que los continentes se desplazan sobre
los fondos oceánicos, de manera que en un principio, se encontraban formando un
supercontinente llamado Pangea. Las características de la deriva continental
vienen recogidas en esta tabla:
Mecanismo
de movimiento de los continentes
|
Los
continentes se deslizan sobre los inmóviles fondos oceánicos
|
Fuerza
que les permite desplazarse
|
Supone
que la rotación terrestre
|
Causas
de los relieves
|
Arrugas
que se producen cuando los continentes se desplazan
|
El hecho de que no
consiguiera encontrar una fuerza lógica que explicara este movimiento restó
credibilidad a su teoría.
Esta hipótesis la expuso por
primera vez en enero de 1912 en una conferencia celebrada en Frankfurt. Más
tarde, en ese mismo año"Die Entstehung der kontinente" (El origen de
los continentes), en el "Pettermans Mitteilungen" y en la
"Geologische Rundschau". La primera versión en forma de libro, data
de 1915 "Die Entstehung der kontinente und ozeane" (El origen de los
continentes y de los océanos. La edición de 1929, más elaborada, presenta una
mayor cantidad de evidencias, particularmente interesantes desde un punto de
vista paleoclimático.
Las pruebas que evidenciaban
la veracidad de la teoría de Wegener son:
-Pruebas geográficas:
Podemos observar con claridad, que los perfiles de los continentes encajan
perfectamente entre sí, lo cual lleva a pensar que en un inicio estuvieron
unidos.
-Pruebas paleontológicas: se
observa que en distintos continentes, aparecen fósiles de una misma especie. Y
se trata de especies que eran terrestres, por lo que no podrían haber cruzado el
océano.
Para ver un vídeo sobre la teoría de la Deriva
Continental pinche aquí.
La despreciacón de la Teoría de Wegener
El geofísico H. Jeffreys,
fue el crítico más duro e influyente de todos en contra de la teoría de los
desplazamientos de los continentes. Este, miembro de la que se podría denominar
"escuela geofísica de la Tierra ultrasólida", consideraba que se
podía demostrar de manera definitiva que la Tierra poseía una rigidez demasiado
grande como para permitir que los continentes se trasladen por su superficie.
En el Simposio de 1926 de la
Asociación Americana de Geólogos del Petróleo, el geólogo R. T. Chamberlin,
muestra una lista de 18 puntos que,
según él, destruían la teoría. Schuchert, paleogeógrafo de Yale, creía que las similitudes de flora y fauna
entre continentes se explicaba por la existencia de algún puente terrestre,
como en el Ártico y discutía la
precisión de los encajes continentales, que implicaban serias distorsiones
cartográficas.
G.G. Simpson, paleontólogo
norteamericano, en nombre redactó en 1943 un artículo robusto y convincente, en
contra de las ideas de Wegener y en el
cual destruía la alternativa del puente intercontinental de la deriva a favor
de la idea de que los animales cruzaran el océano por azar. Años más tarde, no
obstante, este autor acabó aceptando la deriva continental como cierta, ante las numerosas evidencias de la Geofísica
oceánica.
Opinión personal
Obviamente, mi posición se encuentra del lado de Wegener,
debido a las evidencias científicas y experimentales de las que consta su
teoría. La posterior Teoría de la Tectónica de placas, ha demostrado que en su
mayoría Wegener había acertado, a excepción de la causa del movimiento de los
continentes y el origen de los relieves. Pero mi opinión es esta porque vivo en
el siglo XXI, donde la tecnología ha avanzado a pasos gigantescos y nos ha
permitido conocer con claridad muchos procesos que antes, debido a la falta de
material, era imposible. Por esta razón veo muy comprensible que, cuando
Wegener propusiera esta teoría no fuera aceptada. El paradigma en el que se
encontraban en el siglo XX era para los geólogos de la época la verdad más
clara y absoluta, de manera que la llegada de una explicación que su ponía un
cambio tan radical era inaceptable. Esto mismo ocurrió cuando se trató de
explicar el origen de la humanidad, en la antigüedad se creía que el creador
era Dios, y la idea de que procediéramos de los simios era increíble. Hasta que
a medida que la ciencia avanza y las hipótesis se pueden comprobar, no son
aceptadas por la gente. Por si este ejemplo no hubiera sido suficiente,
imaginémonos que mañana un científico nos dijera que en realidad el interior de
la tierra está hueco, es un conjunto de átomos que se mueve a tal velocidad que
producen una fuerza centrífuga que desplaza los continentes y produce calor.
Nadie lo tomaría como cierto y quizá, tras varios años de investigación, esta
hipótesis podría conocerse como completamente verdadera. La historia es cíclica
y como expone Thomas Kuhn en su libro “La estructura de las revoluciones
científicas” en cada época se establece un paradigma científico, capaz de
explicar todos la experiencias a las que es sometido. Cuando comienzan a surgir
anomalías (que el paradigma no sea capaz de explicar) se considera un error del
observador, pero no se admite que el paradigma sea erróneo. Sólo cuando las
anomalías lo hagan evidente, se producirá una revolución científica en la que
se generará un nuevo paradigma. Este mismo proceso ha tenido lugar en la
geología gracias a Wegener.
Las fotografías las he tomado de mi libro de texto, posteriormente indicado.
Fuentes
- Libro de Cultura
Científica para 1º de Bachillerato, Bruño. ISBN: 978-84-696-0936-1
- Libro de
Biología y geología 4º ESO, Santillana. ISBN: 978-84-680-0028-2
Pablo Zarcero 1ºE